martes, 18 de noviembre de 2008

Hielo

Y volví a mi mundo de hielo...

Aquí, todo es más frío, pero seguro. Todo queda demasiado lejos como para poderme afectar. Aquí nada tiene importancia.

El frío me invade, me adormezco y me dejo llevar. Estaré donde no me alcance el sol: sus rayos no derretirán más esta fría banquisa...

¿Pero seré capaz de mantenerme alejada de esa cálida luz?

4 comentarios:

El Viajero dijo...

el frio congelara tu corazon y la bruja de las nieves te llevara en su carro a su palacio de hielo y entonces llegara un momento en que tu corazon estara tan helado que no recordaras tu propio nombre ni a tus amigos...creo q es un riesgo peor que dejar qeu te caliente el sol... no crees?

Art. dijo...

Hacerse una armadura gélida está bien, protege de lo de fuera y tú puedes conservar tu propio calor.

El problema es que siempre acaba llegando alguien o algo que la rompe, y al final te quedas peor que al principio.

Marlén Curiel-Ferman dijo...

Hola Lorena!

Muchas gracias por visitarme. Eres bienvenida siempre al más humilde blog de la Marlena.


Y pues estaría bonito viajar en el tiempo, no? Tú a qué época viajarías?

Yo a los años 30 o 60...

Tu blog está muy chido. Tiene cierto aire melancólico que cae bien en estos días de preinvierno.

Un abrazo y un saludo desde México,

Mar

J dijo...

Mientras el frio no resida en tu corazon sino solo en el exterior, sera un una oportunidad más de crecimiento. =)

-J